En los Estados Unidos de América por ejemplo, se han creado empleos, autoempleo, teletrabajo o trabajo a distancia
![]() |
Empleos: La búsqueda de un trabajo productivo |
Empleos: La búsqueda de un trabajo que genere ingresos
Empleos productivos, generadores de ingresos sostenibles en el tiempo producto del trabajo, representan el principal motor de crecimiento de una economía sana.
Sin embargo, cada vez resulta más dificultoso emplear a millones de jóvenes que egresan de las instituciones de educación superior, por lo que empresas y Estados o Gobiernos se ven frustrados ante la amenaza que representa para las democracias en el mundo una población ociosa y peligrosamente desamparada.
Es allí entonces, donde la creatividad debe saltar a la vista, y las oportunidades hay que crearlas, pero para lograrlo es necesario disponer de experiencia y la voluntad de co-crear con los jóvenes oportunidades.
Es importante saber, que una gran cantidad de servicios son requeridos en el mercado formal e informal, y muchos de ellos son satisfecho por terceras personas o empresas especializadas en tal cual actividad económica.
Eso significa que, las oportunidades de empleos siempre están allí, muchas de esas actividades son sub-contratadas por las empresas para evitar la saturación de su nómina formal y poner en riesgo las finanzas de su empresa.
Pero, muchas de las oportunidades de empleos hay que aprender a crearlas, incluso a crear la necesidad de tal o cual servicio, eso es innovar.
El empleo representa la principal estrategia para la distribución de la riqueza de las naciones, por lo que sí que vale la pena poner mucha atención sobre las nuevas propuestas generadoras de empleos en el mundo.
En los Estados Unidos de América por ejemplo, en la última década se han creado insospechadas formulas generadoras de nuevos empleos, llamadas técnicamente como autoempleo, teletrabajo o trabajo a distancia.
Resulta fundamental como sociedad aprender a trabajar bajo estas modalidades de empleos productivos. Muchas de ellas aun necesitan más investigación y desarrollo desde las universidades para fomentar su práctica, al mismo tiempo que el mismo Estado o Gobierno debería ocuparse de promoverlas.
En el campo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs), por ejemplo, los hallazgos son impresionantes, estamos en presencia de una nueva etapa del desarrollo publicitario hacia el soporte digital, sin embargo, falta mucho por aprender, en el sentido de que los usuarios receptores no están recibiendo una compensación por la llegada de tanta publicidad, es allí donde el modelo de publicidad distributiva de la riqueza puede ser una forma de devolverle a los usuarios parte del enriquecimiento que las grandes empresas acumulan producto del posicionamiento de sus marcas en las mentes de los usuarios.
El otro tema es el desarrollo de Entornos Locales Inteligentes (Social Smart Cities). Es muy importante prestar atención a las posibilidades de construir inteligencia colectiva a través del uso de las TICs.
Una de las herramientas más poderosas para hacerlo son las herramientas de Smart Google, donde ya existen casos de estudios que han arrojado resultados satisfactorios en cuanto a aprendizajes organizacionales, participativos e incluso de inteligencia emocional, pues la actitud de co-crear amerita de un inmenso esfuerzo motivacional que hay que gestionarlo.
Estos dos casos antes explicados, representan oportunidades que podemos trabajar a través de entrenamiento y capacitación en una primera etapa de personas interesadas, para luego ir seduciendo a otros actores.
Estamos hablando por ejemplo de un empleo muy generoso y pertinente como lo son los Servicios Webmaster, que trascienden más allá de las comunidades pues son generadores de negocios y por tanto de crecimiento económico local.
En fin, la educación siempre será la herramienta fundamental para desencadenar procesos de innovación y desarrollo socio económico.
COMENTARIOS